4 de marzo de 1977- 4 de marzo de 2023

 




Escrito y publicado en el facebook el 4 de marzo de 2023 con motivo del 46 aniversario de la muerte de Andrés Caicedo. Rosario, su hermana, me hace un elogioso comentario. 

 

4 de marzo de 1977-4 de marzo de 2023. "Viene con su libro feliz, y se encuentra con don Carlos Alberto y le dice: ¡Mire Que viva la música!, y le dice él "déjemelo leer", ¡no, porque apenas me acaba de llegar! La anécdota la refiere Guillermo Lemos, uno de los mejores amigos de Andrés Caicedo. He puesto las fotos del libro, ¡Que viva la música!, para contar mi propia anécdota. Los domingos me levantaba muy temprano para ir a misa, a la iglesia de San Juan, en Pasto, y cuando salía me dirigía presuroso al puesto de revistas a comprar el periódico, El Espectador, que se había convertido en uno de mis rituales impostergables, básicamente porque me puse a coleccionar El Magazín Dominical. Aquella edición estaba dedicada a Andrés Caicedo y yo, en honor a la verdad, no me había leído de él sino El Atravesado, la famosa edición con el sello editorial Pirata de Calidad, gracias a la generosa contribución de una amiga, vecina y compañera de la escuela. Estoy hablando del año 1976, posiblemente finalizando el mes de diciembre. Ella, mi compañerita, lo tenía en la mano, y como nuestras casas quedaban juntas, me aproximé para hablar un poco y preguntarle sobre el libro. "Es de un escritor caleño, y me ha gustado mucho, si quieres te lo presto" Acepté el ofrecimiento, y como ya estaba anocheciendo, me encerré temprano en mi pieza para empezar la lectura. Lo leí de un solo tirón sin percatarme del tiempo y de las horas transcurridas. Al otro día se lo devolví repitiéndole a mi vecina las mismas palabras: ¡Uf, qué lectura, me gustó muchísimo! Ambos sonreímos. Pasados los años me di cuenta de la existencia de otro libro del mismo autor, ¡Qué viva la música!, y mi extrañeza por no haberlo leído. Se lo comenté a mi padre. Como siempre me escuchó poniendo mucho cuidado, pero sin agregar nada. Al día siguiente, lunes, me dijo acompáñeme que necesito hacer una diligencia. En aquel tiempo vivíamos en la calle 16 # 28-101, barrio San Andrés. Tomamos directo por la 28 hasta llegar a la calle 19. Al pasar por la Papelería y Librería Distribuciones Escolares detuvo la marcha y entró. Yo lo seguí. Nos atendió un señor ya mayor, bajito, que tenía puesto un gorro de lana. Enseguida supimos que se llamaba Segundo. ¡A la orden!, dijo, y papá, agradeciendo la atención, le dijo "busco un libro llamado ¡Que viva la música!" Don Segundo inclinó la cabeza con gesto dubitativo. Si, es de un muchacho caleño que se suicidó cuando apenas tenía 25 años, ya se lo traigo. Yo no tenía palabras para expresar mi sorpresa. Menos que papá se haya tomado esa molestia, estando en circunstancias económicas apuradas. Yo no tenía dinero en esos momentos. Y permitir que papá haga ese gasto sólo por el comentario que le hice el día anterior, era excesivo. Cuando don Segundo regresó con el libro en la mano, papá le pregunto sobre el valor. "¡Vale 350 pesos, es la única edición que tenemos!" Era la tercera edición, 1982, de la editorial Plaza y Janés, Novelistas del día, NARRATIVA COLOMBIANA. Miré a papá que se estaba metiendo la mano al bolsillo (mínimo se estaba gastando la plata del almuerzo de toda la familia) Lo llevamos, dijo con aire decidido como para que yo me tranquilizara. Recibimos el libro y salimos. De lo que si estuve seguro era de que papá había entendido ese fervor manifiesto por la obra de un escritor que ya llevaba muerto seis años y del cual pude complementar esa admiración leyendo ¡Que viva la música! en una ciudad fría, donde no se escuchaba salsa, y la neblina parecía ocultarlo todo. Hoy se cumplen 46 años del suicidio de Andrés en su sitio de residencia, el edificio Korkidi en la avenida 6ta. #13-64 al haber ingerido 60 secobarbitales. Ese mismo día recibió su novela impresa y publicada por Colcultura, ¡Que viva la música! Ahora está más vivo que nunca gracias a su genio. 

 

De Rosario: 

¡Esto es como todos tus escritos, genial!!! Se debería publicar, aparte de en este Facebook, al que yo llamo “el periódico popular y democrático del pueblo” — sabiendo que a pesar de ser manejado por los grandes intereses, si nos da la oportunidad a muchos y muchas de publicar—publicarlo en un periódico nacional!! ¡Contar tu bello testimonio!! 

 

Mi respuesta: 

 

Rosario Caicedo gracias, sabes muy bien que uno de los objetivos que nos guían es escribir y dar a conocer el fruto de ese trabajo, muy limitado, es cierto, aunque gracias a ese "periódico popular del pueblo", que es el facebook, ha sido posible llegar a muchas personas, y que, por intermedio de ellas, se vaya corriendo la voz. Guardamos la esperanza, te lo he dicho, Rosarito, de poder llegar a publicar, ojalá pronto, hay material, y cada día nos esmeramos por aumentar el margen de esa producción literaria. 

 

De Rosario: 

 

Nicolás, eres un gran escritor. 

 

Mi respuesta: ¡¡Rosario gracias por esas valiosas palabras!! ¡Y que lo digas tú, me llena de orgullo!! 

 

De Rosario: 

 

Nicolás, ni más faltaba. Gracias a ti.


Nicolás Figue-Vocesdispersas-6 de marzo de 2023, lunes. 

 

 

 

 

 

 

 

Comentarios

  1. Ojalá no esté lejos el día de publicar tus libros y des testimonio de tu gran don de escritor.

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