Yolanda que podría ser también Ximena
Pienso que nunca voy a ser capaz de alejarme del vicio. El vicio de escribir. Y aunque a ti han sido pocos los momentos en que de verdad te he dedicado algo de eso, qué sé yo, un poema breve, un mensaje apresurado, una carta apretada de historias, de quejas, y de amorosos reclamos, las palabras, dichas en la forma tan caótica como las junto para ti no quieren propiciarte otra cosa que locura, mucha confusión, el enredo del amor que nunca entenderemos porque nace del tiempo q ue nunca vivimos, que jamás fuimos, los pedazos sueltos en ese mapa de sensaciones que nunca pudimos juntar.Aún así, tuve que recurrir, hace un par de años ya, a unas cuantas líneas mal escritas para darte a conocer mis sentimientos. Oh sorpresa tu respuesta al enterarme que su contenido tuvo la virtud de removerte los cimientos de un cariño casi que bien construido, al menos sostenido por el influjo meridiano de esas canciones lentas del bar de la esquina y que nos ponían a desear la muerte después de extasiarnos